Christiaan Lecarnaqué Linares
Detrás de la ventanilla del cajero, Belén Medina Aguad recibe el pago de la cuenta de un hombre de cabello cano, satisfecho tras degustar uno de los aperitivos de la ya tradicional “Sanguchería Mercaderes”, un negocio familiar fundado en 1960.
“Aquí todos nos ponemos la camiseta”, señala. Ella junto a su padre dirigen este negocio y también pueden ayudar a repartir los pedidos a los clientes, principalmente en la mañana, cuando tiene mayor demanda.
Belén trabaja de la mano de su padre José Medina del Carpio, que es el gerente de este negocio desde 2009, para consolidar la pequeña empresa familiar. Sus estudios en Administración de Negocios en la Universidad Católica San Pablo, le brindaron las herramientas necesarias para ello.
Todo inició en Mercaderes
La “Sanguchería Mercaderes” data de 1960, cuando su abuelo emigró de Palestina y decidió abrir este restaurante en el local que en la actualidad funciona en la calle del mismo nombre. Empezó con la venta de sándwiches de salchicha arequipeña, una de las especialidades del local. El negocio iba bien, luego en 1994 pasó al mando de José Medina del Carpio, padre de Belén. A partir de ese año, hubo un repunte en la “Sanguchería Mercaderes” y sus sabores se hicieron más conocidos entre el exigente público arequipeño.
Aunque la vida de Belén Medina está vinculada a esta empresa desde pequeña, ingresa formalmente al negocio familiar en 2009, mientras estudiaba la carrera de Administración de Negocios en la San Pablo (ingresó en 2005 y terminó en 2011). “Yo venía de la universidad, me gustó estar acá y seguir el ritmo del negocio, por eso me metí de lleno y me quedé para ayudar a mi papá”, señaló.
Al inicio realizaba tareas administrativas y en la actualidad es la “mano derecha” de su padre. “El trabajo es en equipo. Él es la cabeza y lo conversamos todo entre los dos”, aseguró.
Sándwiches de calidad
Este negocio ofrece generosos sándwiches de salchicha arequipeña, con embutidos que ellos mismos producen en una planta instalada en el distrito de Miraflores. Este emparedado cálido, jugoso y delicioso, junto al pan y cremas añadidas, forman un potente aperitivo a la altura de las expectativas que todo hijo nacido al pie del Misti exige a los restaurantes locales.
Asimismo, tienen otras variedades, como los sándwiches de lechón, chicharrón, además de salteñas que ofrecen al cliente en el local ubicado a una cuadra de la plaza 15 de Agosto.
En este establecimiento empezó una historia muy particular, y más de seis décadas después, los arequipeños aún pueden descansar de su rutina, del sube y baja por una calle que todos los días huele a estrés y ansiedad, para disfrutar de un refrigerio con sabor familiar.
EL DATO
El local central se ubica en la calle Mercaderes; atiende de lunes a sábado de 09:00 a 19:30 horas. Para delivery pueden contactarse a los números: 054-219991 o 983195366. También pueden visitar su fan page: https://www.facebook.com/sangucheriamercaderes.
Como ya se mencionó, otro punto a favor del negocio es que elaboran sus propios productos, como los embutidos que algunos clientes piden poner a la venta, aunque ello no está en sus planes.
En la actualidad, cuentan con dos locales, uno en la calle Mercaderes y el otro en el Club Internacional. La meta es continuar creciendo en los próximos años.
El objetivo, según Belén Medina, es cumplir con el eslogan del negocio: Precio, calidad y buen servicio, elementos claves para mantener a su clientela y seguir creciendo en los próximos años. “Queremos mantener la tradición gastronómica a lo largo de los años, mantener la calidad de los productos y tener precios asequibles a la clientela”, dijo.
Para Medina lo aprendido en la San Pablo ha sido importante a la hora de manejar un negocio y mantener viva la tradición familiar. “Gracias a mi carrera es que ingresé acá y he podido darles una mano a mis padres, no sólo en lo administrativo, sino también al momento de llevar las cuentas, en el marketing, publicidad, etc. La carrera me ayudó mucho para eso”, comentó.
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