Juan Pablo Olivares
SoftLand Gaming Center, es el LAN center o centro de entretenimiento para gamers más grande de Arequipa con 180 computadoras optimizadas para los videojuegos. Es un ambiente en el que resaltan las luces multicolores de baja intensidad y una playlist de música pop urbano de fondo.
A pesar de estar ubicado en la céntrica calle de Paucarpata, en medio del comercio formal e informal, el ambiente invita a la comodidad y concentración. Allí, cada día acuden cientos de jóvenes entre los 18 y 25 años de edad (en su mayoría varones) para jugar Dota 2, Valorant, Fortnite, entre otros videojuegos.
Cuna de talentos
Según Juan Carlos Mamani Ticona, propietario de SoftLand Gaming, el LAN center es un lugar donde los jugadores socializan y hacen comunidad. Pero sobre todo, es donde tienen la oportunidad de alcanzar el sueño de convertirse en profesionales y famosos.
Según las estadísticas de STEAM, la plataforma de descarga de videojuegos, en el Perú existen cerca de 2 millones de gamers activos especializados en Dota 2. Además, se estima que más de 5 mil LAN centers operan en el país.
En Arequipa, según Giancarlo Coricasa Cruz, videojugador y fundador del Club Gamers de la ciudad, antes de la pandemia por covid-19 existían unos 5 mil jugadores en constante competición en Dota 2.
Sin embargo, después de la pandemia, debido a que ya no se realizan torneos regulares y la falta de establecimientos para entrenar, esta cifra se redujo en un 20 % y la mayoría de gamers dejaron el nivel competitivo y se quedaron como amateurs.
Es así que empezaron a jugar en línea desde casa, sin la competitividad y emoción que se da al jugar de manera presencial. “Antes, existían 40 a 50 clanes o equipos que estaban en constante competencia. Ahora, el registro es de 10 o 15 clanes a lo mucho, y muy pocos torneos”, lamentó Coricasa.
Lugares especializados
Por su parte Mamani, aunque admite que existe un bajón en cuanto a la cantidad de gamers en Arequipa, aguarda con esperanza que la industria de los videojuegos tenga un repunte en su crecimiento. No obstante, esto no repercutiría en el negocio de los LAN centers, ya que los jugadores optaron por tener su propia cabina en casa, aunque no tengan la tecnología ni comodidad que ofrecen estos establecimientos.
En ese sentido, Juan Carlos Mamani explica que un LAN center de 30 computadoras a más, debe tener computadoras y monitores gamers, que son de más de 240 Hz y que proporcionan una imagen más nítida y fluida. Además, deben contar con una fibra óptica de alta velocidad, sillas especiales o butacas, ambientes amplios y periféricos (mouse y audífonos) especiales para videojuegos.
“Con una computadora de alta tecnología, crecen las posibilidades para que un jugador llegue a ser profesional”, asegura Medina.
Alta tecnología
En esa línea, Christian Delgado, docente de la Escuela de Ciencia de la Computación de la Universidad Católica San Pablo (UCSP) advierte que el crecimiento computacional, en lo que es la PC gamer, se está ralentizando (disminuyendo), debido a que el silicio (semiconductor que trasmite corriente que se interpreta como información) que es el componente de la computadora, tiene un límite de velocidad.
El especialista explicó que ante el límite de velocidad de los procesadores, la alternativa es usar un operador cuántico que, a diferencia de una computadora, utiliza la física cuántica que se basa en duplicar la información a determinada distancia y de forma instantánea; no obstante, esto tomaría tiempo en promoverse.
“La opción del operador cuántico se dará en un largo plazo, porque el trabajo aún está en una etapa inicial de pruebas”, explicó.
Inversión y dedicación
La industria de los videojuegos sigue siendo una oportunidad para los gamers, lo que los lleva a aspirar o insistir en su objetivo de ser profesionales.
Para ello, no sólo se requiere de talento y perseverancia sino también de una inversión. Un joven que se inicia en el mundo del videojuego debe invertir entre 1200 a 2000 soles en una configuración (computadora) básica.
Una configuración intermedia va de 4 mil a 5 mil soles. Mientras que para una configuración de alta gama y otros accesorios se debe gastar entre los 10 mil a 20 mil soles, e incluso más.
Los gamers cada día están más dedicados a este deporte, pero para poder estar en un nivel competitivo o llegar a ser profesionales, necesitan entrenar (jugar) varias horas al día. Es decir, necesitan desarrollar sus capacidades técnicas y hasta físicas.
En ese sentido, un jugador amateur se dedica a esta actividad entre 3 a 4 horas diarias, y para aspirar a ser profesional el tiempo de entrenamiento supera las 10 horas diarias.
Al respecto, Juan Carlos Mamani aclara que para desarrollar un entrenamiento de varias horas es necesario que el joven sea asesorado por un equipo profesional de trabajo, integrado por un entrenador, psicólogo y nutricionista.
Gamers y profesionales
Asimismo, para Christian Delgado, el gamer posee un potencial para la creación de videojuegos. Pueden desarrollar la computación gráfica, construir motores gráficos, entre otras cosas que están dentro de la carrera de Ciencia de la Computación. “Los gamers son personas que tienen una capacidad y habilidad especial. Tienen un plus para el aprendizaje y manejo de la computación”, finalizó.
Discusión sobre el post