Jhonny Pineda
Después de Lima, Arequipa es la región económicamente más importante del país por la actividad minera. Manuel Bedregal Salas, docente del departamento de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Católica San Pablo, lo resume en una frase, “la presencia de la minería en Arequipa lo cambia todo”, pues es la principal actividad económica y también, potencia diversos sectores económicos.
“En los últimos años, alrededor de 35% del PBI de la economía regional proviene de la minería, pero hay estudios que relacionan el valor de la exportación minera arequipeña con los colaterales que genera la mina, ya sea en transporte, industria, servicios y construcción. Eso produce 15% más, con lo cual, la actividad minera respondería por la mitad de la economía en Arequipa”, explica Bedregal Salas.
Epifanio Baca, integrante de Propuesta Ciudadana, concuerda en que esta ‘industria’ es parte importantísima de la economía de Arequipa, ya que siendo el centro urbano más grande del sur, ha desarrollado una serie de servicios que atienden a la minería en esta parte del territorio.
La vicepresidenta de Asuntos Corporativos de Cerro Verde, Julia Torreblanca, señaló en una reciente entrevista, que en Arequipa 56% de las proveedoras de la actividad minera son microempresas, 35% son pequeñas y medianas empresas, y 10% restante son grandes empresas, con ello se evidencia el efecto multiplicador de la actividad extractiva.
Empleo y transferencias de recursos
De acuerdo al boletín estadístico minero del Ministerio de Energía y Minas (Minem), a junio de 2021, la minería proporcionó un total de 225 555 empleos directos a nivel nacional.
Arequipa ocupó la segunda posición con 25 681 trabajadores (11.4% del total), detrás de Ancash, donde se emplearon a 30 004 personas (13.3%) y superando a Moguegua donde contrataron a 23 130 trabajadores (10.3%).
El sector también es una importante fuente de ingresos para los gobiernos regionales y locales a través de las transferencias de recursos (canon minero, regalías mineras y derecho de vigencia). A julio de 2021, estos sumaron un total de S/ 4 654 millones.
Entre las regiones que reciben mayor transferencia, está Arequipa con S/ 417 millones, ocupando el tercer lugar. La primera posición es de Ancash con S/ 1 062 millones y el segundo lugar para Tacna con S/ 480 millones.
No obstante, pese a la importante transferencia de recursos del sector minero hacia la región aún continúa el rechazo de una parte de la población al proyecto Tía María, situado en Cocachacra (Islay), cuyos capitales mexicanos invertirán US$ 1 400 millones y generarían 1 000 empleos en la etapa de construcción, además de exportaciones anuales por 320 millones.
Inversión paralizada
La designación de Pedro Francke como ministro de Economía del Gobierno de Pedro Castillo, no ha tranquilizado al sector empresarial, que ha postergado sus inversiones porque no existe predictibilidad. Las empresas necesitan predecir con un porcentaje superior a 50% cómo serán los próximos años.
“Yo hago una inversión y no la voy a recuperar el próximo año sino en 5 o 10 años. Yo no sé qué va a pasar el próximo año o el próximo mes. Si le van a dar la confianza al gabinete, si van a vacar al presidente Castillo, si van a cerrar el Congreso, si habrá una asamblea constituyente, entonces, las inversiones están paralizadas y no solo en el sector minero” sostiene, Manuel Bedregal.
En cambio, Epifanio Baca, reconoce que el momento político debe inquietar a los empresarios, pero la actividad minera en el Perú depende principalmente de los precios y estos hoy en día son altos.
“Los inversionistas no tienen bandera, lo que ellos necesitan es tener ganancias y si los precios son altos, pueden conversar con los gobiernos. No tienen problemas”, asegura.
Futuro minero
La minería tiene también un panorama expectante en la región. Según el Minem, en Arequipa hay ocho iniciativas en la cartera de proyectos de exploración minera, que suman una inversión de $ 87.7 millones de dólares. Entre ellos se encuentra el proyecto Los Chapitos, situado en los distritos de Atiquipa, Yauca y Chala, con una inversión de $ 41.3 millones; Amauta en Acarí, de la compañía Minera Mohicano SAC que invertirá $ 10 millones de dólares e Iluminadora en Uñon, provincia de Castilla, donde la empresa Newmont Goldcorp Corporation destinará $ 3.8 millones.
Por otro lado, en la cartera de proyectos de construcción de minas, se incluye a Zafranal en Castilla, que debería empezar a construirse el año 2023, con una inversión de US$ 1 263 millones y Pampa de Pongo, en Bella Unión (Caravelí), donde capitales chinos invertirán US$ 2 200 millones para extraer hierro, pero su fecha de inicio aún está pendiente.
EL DATO
En el primer semestre de 2021, de todas las regiones, Áncash ocupó el primer puesto en la producción cuprífera con una contribución de 21.1%. La segunda posición fue de Arequipa con 18.6%. Apurímac quedó en tercera ubicación con13.4% del total.
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