Juan Pablo Olivares
Cuando nos enteramos cómo Rafaela Sánchez Acosta (17), una joven estudiante de la Universidad Católica San Pablo, llegó al atletismo y se convirtió en la mejor en lanzamiento de jabalina en Arequipa, pensamos en una historia llena de sueños y perseverancia que sólo encontramos en el cine o la televisión.
Su carrera (en el atletismo) comenzó hace un año y medio, cuando aún estaba en el colegio y cursaba el quinto año de secundaria. Luego de mostrar talento y capacidad para esta disciplina y participar en diferentes torneos escolares, decidió incursionar en el deporte base de manera competitiva.
Atleta de alto nivel
Para ello, se puso bajo las órdenes del entrenador Carlos Reiley, con quien todo empezó a ser diferente. Entrena a diario en doble horario y cada vez, su exigencia es mucho mayor.
De esa manera, Rafaela aprendió la técnica y se fortaleció mentalmente. “El lanzamiento de jabalina es la prueba más difícil, porque se requiere de mucha fuerza y técnica que, la verdad, me costó aprender en más de un año”, confiesa.
Carlos Reiley sostiene que, en efecto, esta disciplina precisa de mucho tiempo para poder dominarla; en ese sentido, el primer año de Rafaela fue de aprendizaje y experiencia.
Durante ese periodo, la alumna que cursa el primer año de Arquitectura en la San Pablo, potenció sus cualidades para este deporte, como la habilidad y velocidad en brazos y piernas, y el dominio de las posturas más adecuadas para un buen lanzamiento.
“Rafaela tiene un látigo en el brazo. En el primer año aprendió y mejoró su técnica y fuerza; a pesar de que en los campeonatos donde participó no le fue muy bien, este año, las cosas son diferentes”, asegura Reiley.
Logros y objetivos por cumplir
En efecto, este año la deportista participó en el Campeonato Nacional (categoría mayores) y quedó en tercer lugar. También compitió en el Nacional sub-20, donde obtuvo el segundo lugar con un registro de 39 m 25 cm. Esta marca le permitió conseguir el boleto para el Campeonato Sudamericano, que se llevará a cabo en julio, en la ciudad de Lima.
“Será mi primer sudamericano y el objetivo es mejorar mi marca y ganar un cupo para el mundial de la categoría (sub-20), que se desarrollará en agosto en la capital de la república”, asegura.
La mejor lanzadora
Desde su llegada al atletismo, la arequipeña ha mejorado sus marcas y empezó a optimizar su físico. Con tan sólo 17 años es la mejor lanzadora de jabalina en Arequipa y la tercera mejor del Perú. Pero Rafaela y su entrenador quieren más.
Ella buscará superar el récord nacional (49 m), convertirse en la mejor lanzadora del Perú, clasificar a los Juegos Panamericanos de Lima 2027, llegar a un mundial y por qué no, a unos Juegos Olímpicos.
“Ahora practico el atletismo de manera competitiva y responsable. Nunca imaginé que me convertiría en una atleta de alta competencia. Quiero seguir participando en las competencias más importantes”, sostiene.
EL DATO
Rafaela Sánchez fue convocada, por primera vez, a la Selección Nacional de Atletismo sub-20. El fin de semana participó en el sudamericano clasificatorio para el mundial de la categoría.
Sueño universitario
Quienes conocen a Rafaela, la definen como una chica responsable y disciplinada. En la pista sabe que no sólo se trata de competir y ganar, sino de superar sus propias marcas y crecer en cada desafío.
Aunque su corta carrera deportiva ha estado llena de altibajos, ella siempre se mostró fuerte y decidida, al punto de que también busca hacer historia en el deporte universitario.
Quiere participar en los Juegos Universitarios y clasificar al mundial que será el próximo año en Alemania, representando a la Universidad Católica San Pablo.
“Practicar el atletismo y estudiar la carrera de Arquitectura requieren de mucho sacrificio. Pero no pienso dejar ninguno de los dos. Me gustaría ser parte del programa Prodac de mi universidad, a eso también apunto”, dice Sánchez.
Ganas, talento y tiempo tiene Rafaela para cumplir sus objetivos y sueños. Más aún, en una disciplina deportiva en la que, según Carlos Reiley, se alcanza la madurez y máximo nivel entre los 28 y 32 años en damas y entre los 25 y 36 en varones.