César Belan
Sentarse con los más queridos, guarecidos quizá del húmedo clima y del chaparrón estacional propio de Arequipa, es doblemente gratificante si se hace con una buena cinta al frente y una taza de chocolate caliente. Es por eso que —y como diría mi casera— sin compromiso alguno, les presento diez opciones que podrán ver una y otra vez en estos días de fin de año:
- EL BUEN PASTOR Y LAS CAMPANAS DE SANTA MARÍA (Leo McCarey, 1944/1945 – Musical): Bing Crosby es un párroco dotado de un extraordinario buen humor y un espíritu de servicio. En la secuela, Ingrid Bergman será la religiosa que hará las veces de la horma de su zapato. El buen pastor logró un Óscar a la mejor película, en 1944.
- ¡QUÉ BELLO ES VIVIR! (Frank Capra, 1946 – Drama): Ícono de este subgénero y la más vista en EE. UU. por estas fechas. La redención de un hombre en la época más propicia del año para el perdón y la reconciliación. Sencilla, a la vez que enternecedora.
- MILAGRO EN LA CALLE 34 (George Seaton, 1947 – Drama): Un inesperado reemplazo de Santa Claus inundará de fantasía a una familia. Hermoso filme de la década de los cuarenta que ha merecido unas no tan afortunadas nuevas versiones.
- LANCA NAVIDAD (Michael Curtiz, 1954 – Musical): Otra con Bing Crosby. Un entretenido musical en el contexto de la Segunda Guerra Mundial en el que habrá humor de sobra. Muy recomendable.
- LOS FANTASMAS CONTRAATACAN (Richard Donner, 1988 – Comedia): La historia del avaro Ebenezer Scrooge, protagonista de Cuento de Navidad de Dickens, en clave moderna. Bill Murray hará de este drama navideño un buen motivo para reír.
- LOCA NOCHEBUENA (Jeremiah S. Chechik, 1989 – Comedia): Un típico filme noventero. Todas las angustias de estas fiestas contadas con el particular humor de Chevy Chase. Gags, gags y más gags.
- MI POBRE ANGELITO I y II (Chris Columbus, 1990/1992 – Comedia): Gracias a la pobre oferta de la televisión nacional veremos las inagotables travesuras de Kevin McCallister (Macaulay Culkin). Las películas navideñas más taquilleras de todos los tiempos.
- EL GRINCH (Ron Howard, 2000 – Fantasía): La versión de Jim Carrey del simpático duende que quiere robar la Navidad. A pesar de su simplicidad y la sobreactuación de Carrey, suele sacar una sonrisa. La escenografía y el vestuario son de destacar.
- TOKYO GODFATHER (Satoshi Kon, 2003 – Animación): Tres vagabundos recibirán una sorpresa en la víspera de Navidad: un bebé abandonado caerá en sus manos y será la estrella por la que recorrerán su pasado en busca de redención.
- EL EXPRESO POLAR (Robert Zemeckis, 2004 – Animación): Alarde de tecnología más un aburrido guión. La imaginación infantil suplirá lo que haga falta, disimulando la actuación de un Tom Hanks tan versátil como una licuadora de dos velocidades.