La vida silvestre vuelve al Chili

El hábitat que empezó a formarse en el río Chili como consecuencia de su descontaminación, ha provocado que varias especies de aves vivan en sus aguas y alrededores.

Textos y fotos: Heiner Aparicio Ojeda

Un grupo de palomas utiliza las aguas del río Chili para asearse. Gracias a la descontaminación muchas aves viven en sus orillas.
La presencia de un ave de gran tamaño, como el guaco (o huaco) común también es frecuente en los alrededores del río.
El hábitat que se forma en el río Chili es óptimo para que las aves puedan reproducirse y alimentarse.
La tortolita peruana es una de las que más abunda en los alrededores de sus aguas.
La descontaminación del río Chili es clave para que muchas especies vivan en sus alrededores.
Si observas bien, por toda la ribera del río podrás apreciar varias especies de aves, como el pato barcino que descansa en sus aguas.
El Chili, también es utilizado como bebedero por las diferentes especies aladas.
Este guaco adulto es un hábil pescador, se alimenta de algas, gusanos y algunos roedores pequeños.
La prueba más fiel de que la vida silvestre volvió al río chili, es el avistamiento de decenas de patos que viven en sus aguas, esto en el sector de Tiabaya.
Los árboles que crecen en los costados del río sirven como refugio para que estas aves aniden.
Los patos colorados han convertido al río Chili en su hogar, esta especie vive de algas y pequeños moluscos.
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