Cine policial, una forma de enseñar a la sociedad

Efectivos proyectan películas para niños, pero antes les brindan charlas sobre los peligros cibernéticos a los que están expuestos.

Texto y fotos: Heiner Aparicio Ojeda

Todo va quedando listo, los policías se las ingenian para que la película se vea lo mejor posible.
La suboficial Rosmery Quispe, antes de la proyección brinda una charla sobre el grooming (acoso y abuso sexual online).
Entre los policías colaboran para la canchita, el refresco y el arroz con leche que repartirán entre los asistentes a la función de cine.
Los niños llegan temprano para ocupar los primeros lugares y no perderse ningún detalle de la película; las mascotas acompañan a los menores.
En sus rostros se aprecia la alegría porque cada viernes se proyecta películas y muchos de ellos nunca fueron a un cine.
No sólo van a ver la película, también ayudan a ordenar y limpiar el local donde toca la proyección.
Llegan de prisa para ocupar los mejores asientos, esta vez verán la película en el local social de Ampliación Villa Ecológica.
“Sirviendo”, como dice la inscripción en la pared. Esta iniciativa de la policía rinde frutos en los niños, los aleja de los vicios y les enseña a protegerse.
Desde temprano los policías preparan los aperitivos, mientras los niños esperan con ansias y tratan de adivinar qué película proyectarán esta vez.
Los niños llegan acompañados de sus padres. Muchos vienen desde zonas alejadas, todo para no perderse un momento de aprendizaje y relajo.
Muy concentradas, no importa si comparten la silla, pero las niñas no pierden un solo detalle de lo proyectado.
Los niños disfrutan de su película después de aprender sobre situaciones que les puede pasar, como el acoso y el bullying.
El cine policial se inició en pandemia y en algunas casas, entonces asistían pocos niños, hoy superan los 50 y hasta los padres acuden a ver la película.
El objetivo de esta iniciativa es acercarse a la población, para que sepan que el policía es su amigo, además de concientizar y alejar de los vicios a los niños, nos manifiesta el mayor PNP Christian Salazar Zavala.
María Belén fue tres veces al cine, pero las hermanitas Lizet y Mari nunca fueron a uno de verdad, aunque ahora, al estar aquí, se imaginan cómo es.
Los padres muestran su asombro con las escenas y viven la experiencia como si también fueran niños.
El cine policial se proyecta en diferentes lugares del sector de Independencia y ya tiene resultados positivos en los niños. Muchos de ellos esperan con ansias que la iniciativa vaya a su localidad.
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