Redacción
La Universidad Católica San Pablo (UCSP) inauguró su primera residencia universitaria. Este proyecto tiene como objetivo acoger y proporcionar alojamiento a los alumnos internacionales que son parte del Programa de Movilidad Estudiantil entrante de la San Pablo.
María Alejandra Maldonado Adrián, directora de Relaciones Internacionales y Cooperación (DRIC) de la San Pablo, destacó el respaldo e impulso de las autoridades de esta universidad.
“Esta residencia pretende ser un hogar para los alumnos internacionales residentes. Se trata también de una experiencia formativa importante a nivel personal, pues brinda un espacio de convivencia, encuentro intercultural, cómodo y seguro mientras desarrollan sus estudios en la San Pablo”, dijo.
Cada semestre, la San Pablo recibe un número importante de alumnos internacionales para enriquecer culturalmente las aulas del campus universitario. Ellos provienen de universidades de Argentina, Colombia, Brasil, México, Francia, España, Alemania, entre otros países, gracias a los convenios y alianzas que tiene la UCSP con sus pares internacionales.
Alternativamente, la San Pablo ofrece a sus alumnos internacionales el programa de familias anfitrionas. En esta iniciativa participan familias de alumnos, antiguos alumnos, profesores y colaboradores de dicha casa de estudios.
Las primeras residentes
En la residencia universitaria de la San Pablo, actualmente, viven cinco alumnas de Colombia y México. Ellas llegaron para estudiar este semestre en Arequipa.
“Para mí la residencia universitaria ha sido una experiencia nueva. Lo han hecho increíble. Han estado pendientes de cada detalle. La casa tiene todo, no hace falta nada”, señaló Hanna Hidalgo Rodríguez, alumna del sexto semestre de Derecho de Colombia.
“La universidad es hermosa, las instalaciones son completas. Los profesores son amables y resuelven todas mis dudas”, agregó.
Bibiana Sevilla Prieto, alumna del sexto semestre de Administración de Negocios de Colombia, llegó un día después del aniversario de Arequipa. Su intención es aprender más de su carrera desde una experiencia internacional, además, deseaba conocer más sobre la cultura de Arequipa.
“Me gusta la San Pablo, tiene muchos espacios verdes. Me gustó la residencia, es como estar en familia y tener un espacio más personal”, señaló.
Del apoyo en la organización de la residencia que ofrece la San Pablo se encarga la señora Patricia Zevallos, cuya familia ha sido anfitriona por más de diez años. “Las primeras estudiantes de esta residencia siempre estarán presentes, nunca se les olvidará. Aquí van a poder compartir su cultura y su manera de ser. Este es su hogar”, señaló.
El rector de la San Pablo, Alonso Quintanilla Pérez-Wicht, saludó el trabajo desarrollado desde la DRIC e indicó que este proyecto representa uno de los principios fundacionales de la universidad, que es la acogida. “Este es un proyecto largamente acariciado que se está concretando con estas primeras alumnas. Espero que sean felices en esta casa”, indicó.
El evento inició con la bendición de la residencia y posterior inauguración por parte del rector, junto a las principales autoridades educativas de esta universidad.