José Colque
El peligro que implica la desglaciación del nevado Coropuna, ubicado en el distrito de Viraco, provincia de Castilla, región Arequipa, afectaría en un futuro la dotación de agua entre sus áreas influyentes de las provincias de Castilla, Condesuyos, Camaná y La Unión que, en conjunto, albergan a más de 50 mil agricultores.
El alcalde distrital de Pampacolca (Castilla), Ronald Corahua, explicó a Encuentro que debido al calentamiento global, se percibe más el impacto de la desglaciación en la disponibilidad del recurso hídrico para irrigar más de 10 mil hectáreas de cultivo en las jurisdicciones antes mencionadas.
Allí se produce papa, quinua, cebada, trigo, entre otros alimentos. Incluso, hasta 2016, el 10 % de estos campos de cosecha fueron afectados por la falta de agua generada por el deshielo del Coropuna.
“Al bajar la dotación del recurso hídrico se afectaría la seguridad alimentaria […]. Por este calentamiento global se derrite el glaciar y con la tierra que arrastra, debido a los vientos, también puede generar agua turbia, lo que es perjudicial para la agricultura”, mencionó.
En 1955, la superficie glaciar en el Coropuna era de 56 km2. Después de 31 años, en 1986, se redujo 2 km2, a razón de 0.06 km2 por año. De allí en adelante la desglaciación fue más intensa, a razón de 0.33 km2 por año entre 1986 y 2007, y de 0.4 km2 por año en el periodo 2007-2022. El último reporte era de 41 km2 de glaciar hacia 2022, según estudios realizados por el docente de la Universidad Complutense de Madrid (España), José Úbeda.
IMPORTANTE
Pablo Masías, investigador del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet), explicó que el espesor del glaciar del nevado Coropuna promedia los 100 metros de altura, pero en comparación con la Antártida (3000 metros) es pequeño.
En el foro “Coropuna, oportunidades y desafíos frente al cambio climático”, coorganizado por la Universidad Católica San Pablo, a través del Centro de Gobierno José Luis Bustamante y Rivero, el especialista advirtió que esta tendencia es peligrosa para los próximos años.
“La evolución de los sistemas glaciares es en la escala de miles de años, lo que nos permite conocer cómo interactúan y cómo responden a los cambios del clima, prueba de ello es el caso del Coropuna”, precisó Úbeda.
Según detalló, el factor determinante en esta reducción de la superficie de hielo son los cambios en las características térmicas del clima, reportados en los últimos 70 años. Por ejemplo, en sectores aledaños al Coropuna, durante el día la sensación de calor llega a niveles altos y en la noche esto se replica, pero con el frío.
Para conocer a detalle el impacto de esta desglaciación se necesita evaluar las variaciones de espesor y la presencia de hielo por sedimentos en el nevado Coropuna. Esto, debido a que algunos sectores pueden conservar decenas de metros de espesor, es decir, hielo cubierto y enterrado a varios metros de profundidad.
Ligera esperanza
El especialista José Úbeda sostuvo que la creación del Área de conservación regional Coropuna es necesaria para seguir analizando el impacto del cambio climático en este macizo.
“Les voy a dar una ligera esperanza, tenemos un poco más de tiempo para realizar más investigaciones, sobre todo, para pasar de los estudios a los hechos y adoptar medidas de adaptación al cambio climático”, apuntó.
Este proyecto abarcaría 151 mil hectáreas de territorio entre las provincias de Castilla y Condesuyos, con influencia en 13 comunidades campesinas, donde se podrían construir reservorios, desarrollar estrategias de reforestación, recuperación de bofedales, entre otros.
La idea es asegurar la conservación y sostenibilidad de la biodiversidad de flora, fauna, lagunas, la disponibilidad hídrica y seguridad alimentaria para los agricultores y pobladores.
En febrero de este año, el Gobierno Regional de Arequipa inició gestiones para desarrollar el expediente técnico junto con la Asociación Especializada para el Desarrollo Sostenible (AEDES) de Arequipa, pero aún no hay avances concretos.
EL DATO
Según el especialista José Úbeda, la incidencia de los fenómenos de El Niño y de La Niña registrados desde 2015, fue determinante en la reducción glaciar del nevado Coropuna.
IMPORTANTE
Pablo Masías, investigador del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet), explicó que el espesor del glaciar del nevado Coropuna promedia los 100 metros de altura, pero en comparación con la Antártida (3000 metros) es pequeño.