La pobreza que no se mide en Arequipa

Según el INEI, la pobreza en el Perú disminuyó en 1.2 puntos porcentuales en el 2018

“Lo que tenemos son indicadores preocupantes. Ha subido la anemia de 24 a 38 % y la desnutrición crónica, de 4.9 a 5.3 %”, advirtió Miryam Quiñones.

César Ventura Pizarro

Un último informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) sobre la evolución de la pobreza monetaria en el país hacia el 2018 colocó a Arequipa en una posición sobresaliente. La ubica dentro del segundo grupo de regiones con la menor pobreza, junto a Lima, Callao, Tumbes, Lambayeque, Ucayali, Moquegua y Tacna. En estos territorios, la tasa de pobreza oscila entre 11.3  y 13.8 %, mucho menos que en las otras 15 regiones. Sin embargo, este dato no termina de reflejar la realidad de la pobreza en Arequipa.

La concentración de la población en Arequipa metropolitana, así como la ausencia de indicadores sociales en estos cálculos, aproximan la situación de la pobreza, pero no la exponen en real dimensión.

Miryam Quiñones, coordinadora regional de la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza, indicó a Encuentro que “si bien estos cálculos nos dan un marco, no deberíamos quedarnos en el perfil estadístico”.

El cálculo de pobreza monetaria determina que si una persona gasta menos de S/ 183 está en pobreza extrema, si gasta entre S/ 183 y S/ 344 está en situación de pobreza y si gasta más de S/ 344 no es pobre.

Los indicadores sociales no son tomados en cuenta en la medición de la pobreza.

Indicadores sociales

Hasta el momento, no se ha hecho un cálculo completo de la pobreza, según Quiñones. Es decir, un estudio que comprenda los indicadores como el acceso a la salud, la educación, la violencia, la seguridad, el saneamiento y el acceso a los servicios básicos.

El cálculo de pobreza monetaria determina que si una persona gasta menos de S/ 183 está en pobreza extrema, si gasta entre S/ 183 y S/ 344 está en situación de pobreza y si gasta más de S/ 344 no es pobre. Pero esto no es así, advirtió Quiñones. “Lo que refleja es que necesitamos ver el poder adquisitivo de las personas más allá de eso”, cuestionó.

En efecto, según el informe del INEI, la pobreza disminuyó hasta en tres puntos porcentuales en diversas zonas del país. No obstante, para la especialista, “cuando se toman otros indicadores se mide la pobreza de una forma integral. Ahí sí se podría decir que tenemos indicadores preocupantes en provincias”.

En efecto, Arequipa padece de una pobreza particular que no ha sido incluida en este informe. “Lo que tenemos son indicadores de pobreza preocupantes. Ha subido la anemia de 24 a 38 % y la desnutrición crónica, de 4.9 a 5.3 %”, advirtió Quiñones.

Concentración

Por otro lado, la concentración poblacional en la zona urbana de Arequipa metropolitana es muy notoria, pues alberga más del 77 % de la población regional. Por ello, en el cálculo porcentual, los datos de las zonas rurales o de otras provincias no se ven en su verdadera proporción.

Según el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan), Arequipa tiene como región un 0.8 % de personas en pobreza extrema y como provincia, 0.9 %.

Los promedios regionales opacan la situación de pobreza de los distritos pequeños.

Nuevo mapa de pobreza 

En el segundo semestre de este año, el INEI publicaría el primer mapa de pobreza del país que mide este problema no solo en términos monetarios, sino tomando en cuenta también los indicadores sociales; así se mostraría la pobreza en su verdadera dimensión. El último mapa de pobreza se publicó en el año 2013.

Pero si observamos datos específicos como los de la provincia de La Unión, la población en situación de extrema pobreza asciende a 23.8 %. Del mismo modo, dentro de la jurisdicción de la provincia de Arequipa, en San Juan de Tarucani, el 43.9 % de los habitantes está en la misma situación. Estos datos tampoco consideran indicadores sociales.

Las políticas de reducción de pobreza no se deberían centrar únicamente en una lectura económica, sino también en tomar en cuenta aquellos indicadores sociales que son difíciles de revertir.

Fuente: Instituto Nacional de Estadística e Informática

¿Cifras reales?

Por otro lado, como cálculo general, según Quiñones, los datos porcentuales también podrían ser imperfectos. Esto porque las cifras en distritos muy poblados pueden pasar desapercibidas, ya que el porcentaje puede ser mínimo, pero el número de personas que padecen pobreza podría ser mayor que aquel de un distrito pequeño con una taza alta de pobreza.

“Hay que tomar en cuenta la cifra real de la población”, añade Quiñones. Por ejemplo, mientras el 76 % de los pobres en San Juan de Tarucani equivale a 1145 pobladores, el 10 % en Cerro Colorado corresponde a 21 643 personas.

 

 

 

Hasta el momento, no se ha hecho un cálculo completo de la pobreza. Es decir, un estudio que comprenda los indicadores como el acceso a la salud, la educación, la violencia, la seguridad, el saneamiento y el acceso a los servicios básicos.

Lo mismo ocurre si se adicionan otras variables al análisis monetario. Por ejemplo, en cuanto a la anemia, vemos que en San Juan de Tarucani hay 4 casos, mientras que en Cerro Colorado son 318 casos. Según este análisis, no podríamos decir que el primero es el distrito más pobre.

Esta comparación en términos porcentuales termina por hacer pequeños los casos de pobreza en distritos grandes o agrandar los casos en distritos pequeños. Lo cierto es que la utilidad de las cifras no debe reemplazar la situación real que viven las personas o las familias en las diferentes jurisdicciones del país.

Y por lo mismo, las políticas de reducción de pobreza no se deberían centrar únicamente en una lectura económica, sino también en tomar en cuenta aquellos indicadores sociales que son difíciles de revertir, de acuerdo con la realidad particular de cada distrito, provincia o región del Perú.

El dato

La pobreza en Ica y Madre de Dios oscila entre 1.8 y 4.4 %. Estas son las dos regiones con el índice más bajo de pobreza en el país.

 

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