La construcción del proyecto minero Tía María podría iniciar en seis meses

Southern Perú, la empresa operadora de este proyecto cuenta, desde 2019, con todos los permisos aprobados para su ejecución.

Se estima que la construcción de la unidad minera demoraría dos años.

César Ventura Pizarro 

La espera por el inicio de la construcción del proyecto minero Tía María podría estar llegando a su fin. Tras las declaraciones de los nuevos ministros de Economía y Finanzas y Energía y Minas, José Arista y Rómulo Mucho, respectivamente, sobre la necesidad de activar el proyecto en el Valle de Tambo, se abre la posibilidad de acelerar su ejecución. 

Para el abogado especialista en minería y profesor de la Universidad Católica San Pablo, César Montes de Oca, sería cuestión de meses el inicio de la construcción. “Seis meses es más que suficiente para poner una agenda de trabajo (…). Si hay voluntad de todos los actores, mucho menos”, refirió. 

El panorama 

Y es que Southern Perú, la empresa operadora de este proyecto cuenta, desde 2019, con todos los permisos aprobados para la construcción. Sin embargo, ese mismo año el Consejo de Minería suspendió la licencia de construcción al considerar que existe conflictividad ante su desarrollo. 

En efecto, a Tía María le faltaba dos condiciones para empezar a construirse: la primera, voluntad política desde el gobierno nacional y regional para encaminar el proyecto. Con las declaraciones de las autoridades nacionales se estaría confirmando la disposición política desde el Poder Ejecutivo para sacar adelante el proyecto. 

La segunda condición y más importante es la denominada ‘licencia social’. Sobre este requisito, Montes de Oca refirió que no es una condición regulada como tal, es decir que no existe un procedimiento único para obtener este permiso. Se puede lograr esta aprobación a través de un documento o no. Lo importante es que la población sea consultada sobre este tipo de proyectos de gran magnitud y que esté de acuerdo con su ejecución.  

Licencia social 

Este es el término que se utiliza para esta condición de aceptación. Al no tener un procedimiento para la materialización de esta ‘licencia’, Montes de Oca indica que el mejor camino para Tía María es la conformación de una mesa de diálogo donde se atiendan todas las consultas y miedos que tiene la población del área de influencia. 

Para el abogado, en esta mesa se debe plantear una agenda de trabajo, cuya finalidad no sólo sea la aprobación social del proyecto, sino también atender problemas multisectoriales. Por ejemplo, fomentar proyectos de agricultura y pesca, que son las principales actividades económicas de la zona. Asimismo, evaluar la cobertura de servicios básicos y de salud, entre otros. 

En estas reuniones deben estar incluidos representantes del Estado, de la empresa y de la población. “Se toman los bancos de proyectos de las entidades públicas y evaluamos qué proyectos se pueden desarrollar desde la empresa privada, a través de los diferentes mecanismos de inversión”, precisó el abogado. 

El riesgo de este camino, de acuerdo con Montes de Oca, es que existan operadores políticos que intenten dilatar el desarrollo de estas reuniones y alarguen el proceso. Una vez superado este paso, la empresa ya podría planificar con sus proveedores la construcción de la unidad minera. Es decir que, antes de fin de año, Tía María en el Valle de Tambo podría ser una realidad. 

EL DATO 

La inversión estimada del proyecto minero Tía María es de US$ 1400 millones.

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