Más pobres en el Perú

Juan Carlos Eguren
Excongresista

Los seis años y medio perdidos por el piloto automático de Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski nos pasan factura. Si se hubiera mantenido el ritmo de crecimiento del segundo gobierno de Alan García, la pobreza se debería haber contraído por lo menos 5 %, apartando de la necesidad a más de un millón y medio de compatriotas. Pero, por el contrario, nos dejaron 375 000 personas pobres adicionales.

La razón fundamental es la cobardía para impulsar las reformas indispensables. El modelo actual no da para más y todo lo que podemos esperar de este es solo retroceso y más pobreza para más peruanos, año tras año. Pueden apostar que al término del 2018 nuevamente el índice se incrementará y así sucesivamente hasta el 2021 si el Gobierno, con el apoyo del Congreso, no hace lo que corresponde.

Existe una relación directa del crecimiento del PBI con la reducción de la pobreza, pero creciendo a menos del 5 % no hay forma de reducirla. La receta no tiene ningún misterio: inversión, inversión y más inversión. Para ello se deben fortalecer las ventajas competitivas (frente a otros países) y retomar la agenda de competitividad que se abandonó hace varios años.

El círculo virtuoso indispensable es reformas, inversión, autoridad, competitividad, seguridad jurídica, confianza-expectativas, recaudación tributaria para infraestructura, educación, salud y seguridad, dando como resultante más oportunidades para todos, más clase media y menos desigualdad.

El último gobierno y lo que va del actual se han enfocado sin éxito en la inversión pública, sin percatarse de que esta solo representa el 20 % de la inversión total. La gran locomotora sigue siendo la inversión privada, que representa el 80 % y está parada sin que se haga algo relevante para moverla.

En esa línea, toda inversión en el marco de la ley es bienvenida, pero si alguna mueve la aguja de manera relevante y significativa es la que proviene de la minería, por su inmediato impacto en otros sectores, como construcción, metalmecánica, transportes y servicios en general.

Espero que en la presentación del nuevo gabinete ante el Congreso —en búsqueda del voto de confianza, este próximo dos de mayo—, el premier, César Villanueva, nos sorprenda con la lucidez y el sentido común que el momento requiere.

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