Redacción
El moderno sistema de aisladores sísmicos instalados en la ampliación del edificio María Nieves y Bustamante de la Universidad Católica San Pablo, reducirá daños en su estructura en caso de un terremoto, indicó el coordinador de la oficina de Gestión de Proyectos de Infraestructura de esta institución, Juan Carlos Almonte Burgos.
Este es el primer edificio educativo que cuenta con este tipo de tecnología en la ciudad de Arequipa.
En total, se instalaron 15 aisladores sísmicos tipo LRB, diseñados con caucho natural, reforzados con zunchos metálicos adheridos por vulcanización y un núcleo de plomo en la base de la estructura de 4 niveles.
Como su nombre lo indica, estos dispositivos antisísmicos permiten aislar la edificación del movimiento sísmico, de tal manera, que durante un temblor o terremoto evitamos los desplazamientos bruscos y disminuimos los daños en la edificación.
“La instalación debe ser muy precisa por tratarse de una estructura vertical. En este caso, el sistema tiene la capacidad de resistir un terremoto de una intensidad similar al ocurrido en 2001, en Arequipa. Esto significa que la infraestructura no colapsará”, precisó el ingeniero.
La idea central del aislamiento sísmico es que la energía emanada durante un movimiento, no entre en contacto directo con la edificación y no se mueva al mismo ritmo del suelo.
El objetivo es obtener altos niveles de seguridad y mejorar el comportamiento de las estructuras ante eventos sísmicos, tan frecuentes en nuestra ciudad, así como proteger a sus ocupantes.
Además de los aisladores, también se incorporaron cinco deslizadores de tipo POT que permiten que la edificación se ladee durante el sismo, mas no llegará a desplomarse.
Los dispositivos fueron elaborados en Malasia, a medida de los requerimientos solicitados por la San Pablo para su edificio. La compra fue realizada a la empresa francesa Freyssinet, líder mundial en venta de mecanismos y aparatos de aislamiento sismorresistente.
La instalación de los aisladores y deslizadores fue realizada por un equipo técnico de la San Pablo y contó con la supervisión de especialistas de la compañía extranjera, junto a un equipo de gerencia y supervisión de obra BIMIT y de la constructora Carmen Inmuebles S.A.
Compromiso con la seguridad
Este proceso se rigió bajo la norma E-031 de aislamiento sísmico, obligatoria para la edificación en el Perú, publicada en noviembre de 2019. Aunque la disposición está vigente sólo para la construcción de hospitales, la San Pablo quiso incorporar esta normativa en su nuevo edificio para salvaguardar la seguridad de sus estudiantes, docentes, personal administrativo y visitantes.
“Como universidad estamos comprometidos en poder desarrollar y aplicar nuevas tecnologías que busquen seguridad en las estructuras. Las personas que van a hacer uso de la edificación, tienen que sentirse seguras donde van a realizar sus labores educativas. Desde la academia impulsamos este tipo de proyectos innovadores que busquen este objetivo”, agregó el ingeniero Almonte Burgos.
Luis Miguel Chávez, jefe del Área de Logística, Infraestructura y Seguridad de la San Pablo, destacó que este edificio se ha construido aplicando una iniciativa desarrollada en el Departamento de Arquitectura e Ingeniería de la Construcción, tomando como base la norma de aisladores sísmicos. De este modo, se integró los conocimientos académicos a la obra.
Además, resaltó que un proyecto con un sistema de aisladores sísmicos puede tener un incremento de 10 % más en el costo estructural de la edificación, pero se compensa con un mejor comportamiento y menor impacto en la infraestructura durante un temblor o terremoto. Pese a estas ventajas, aún no es común aplicar esta tecnología en Perú, aunque estamos en un país altamente sísmico.
Beneficioso también para la formación
La construcción de la ampliación del edificio María Nieves y Bustamante de la San Pablo inició el 10 de julio. El edificio ya está operativo en sus dos primeros niveles. Durante estos meses, estudiantes de Arquitectura e Ingeniería Civil de la San Pablo realizaron visitas guiadas por sus docentes y especialistas de la obra.
Esto permitió que tanto alumnos y docentes de ambas carreras pudieran apreciar, de primera mano, el proceso de montaje de los aisladores sísmicos y los deslizadores para conocer más de cerca ambas tecnologías. Esto resultó muy ventajoso en su proceso de formación profesional.
El aprovechamiento de la obra para el aprendizaje se extendió a estudiantes de otras universidades locales y grupos de profesionales del sector construcción. La edificación podrá seguir siendo visitada con fines académicos, previa coordinación con el área de Logística, Infraestructura y Seguridad de la San Pablo.
La nueva infraestructura
Está ubicada en el campus de San Lázaro de la San Pablo. Cuenta con 6 niveles, 2 en la subestructura o sótano, y 4 en la superestructura, finalizando la subestructura están instalados los aisladores y deslizadores sísmicos.
La nueva edificación tiene un total de 2877 metros cuadrados en área techada, distribuida en 8 ambientes académicos, áreas de estar en el primer, tercer y cuarto nivel del edificio, un auditorio (en el sótano) con capacidad para 150 personas, una terraza jardín en la parte superior, un ascensor, servicios higiénicos y otros complementarios.
Incluye un sistema ecoeficiente, ya que tendrá un patio interior donde se usará parasoles diseñados, ubicados de manera estratégica para aprovechar la luz del sol, pero evitando el ingreso directo de los rayos solares, de este modo, el uso de aire acondicionado será prescindible.
Esta edificación representa un aporte innovador de parte de la San Pablo para el sector construcción en Arequipa, y seguirán usando estas tecnologías en sus futuras obras de infraestructura.