¿Por qué las autoridades de Arequipa insisten en ejecutar obras en temporada de lluvias?

José Colque

Ejecutar obras, principalmente viales, en vísperas de la temporada de lluvias no es recomendable y, en muchos casos, refleja la falta de planificación de las autoridades; así lo advierte el especialista en gestión y dirección de proyectos de construcción, Juan Carlos Almonte.

“Al exponerse todos los materiales y el terreno de la obra, pueden saturarse y malograrse con el agua de la lluvia, generando posibles paralizaciones, adicionales económicos y ampliaciones de plazo. No se recomienda realizar estas obras a menos que se tenga un plan de contingencia que pueda protegerlas, pero si no se hace, como se nota en varias obras, definitivamente habrá problemas”, alertó.

Solo en el Cercado se han registrado importantes intervenciones por parte de la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA), como la avenida Andrés Martínez, en Vallecito (que ya fue habilitada, pero las veredas y bermas aún están inconclusas), y la avenida Abelardo Quiñones (donde ya se habilitó el carril de subida, pero falta aún el de bajada), que conecta Yanahuara con la avenida La Marina.

Además, quedan pendientes, según la MPA, la intervención del tramo de la avenida Lambramani, entre las avenidas Los Incas y Venezuela (cuyo inicio se postergó hasta el 2 de enero), y la de la avenida Juan de la Torre, cuyas obras aún no tienen fecha de inicio.

Otro caso particular es la intervención en la avenida Miguel Grau, en Paucarpata, ejecutada por la municipalidad distrital de esta zona, que inició en octubre de este año y debe culminar en mayo de 2026. A fines de noviembre, la rotura de una tubería matriz provocó una especie de huaico en el lugar, dejando piedras y tierra esparcida en al menos dos cuadras.

Riesgo a la vista por temporada de lluvias

Lo ocurrido en Paucarpata refleja parcialmente lo que sucedería si se acumula el agua de las lluvias en una zona donde se ejecutan obras, así lo advirtió Juan Carlos Almonte, también profesor del Departamento de Arquitectura e Ingenierías de la Construcción de la Universidad Católica San Pablo (UCSP).

El peligro es latente y el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) lo confirma. “La temporada de lluvias está dentro de lo habitual, y se estima que se registren entre fines de diciembre, febrero e inicios de marzo, que es lo más probable en la ciudad. Este año, por la tendencia al calentamiento global, no se descarta que las lluvias más peligrosas se registren entre enero, febrero o marzo”, sostuvo José Luis Ticona, especialista en climatología y meteorología del Senamhi en Arequipa.

Actualmente, ya se registran precipitaciones en zonas altas de las provincias de Caylloma, La Unión, Castilla y Condesuyos, según informó Ticona. También aclaró que el fenómeno Dana, que podría impactar en Arequipa, no tendría relación con las lluvias sino con una especie de nieve y se registraría en cualquier temporada de 2026.

Falta de planificación

El alcalde provincial de Arequipa, Víctor Hugo Rivera, justificó la ejecución de estas obras a finales de 2025, argumentando que los desembolsos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) se hicieron recientemente.

“Lamentablemente, los tres primeros meses [del año] no se pueden ejecutar [las obras] porque recién se aperturan los presupuestos, a partir de ello se hace el perfil y el expediente técnico. Recordarán lo que ocurrió con la avenida Avelino Cáceres, que debió hacerse en diciembre de 2023, pero se ejecutó en mayo de este año”, manifestó.

La autoridad también detalló que los contratistas de las obras en ejecución le aseguraron que no habría problemas si se registran lluvias, “a menos que sea una lluvia torrencial, donde sí se tendría que paralizar en el momento adecuado”, señaló.

Juan Carlos Almonte opinó que, si bien los gobiernos locales y regionales reciben desembolsos económicos del MEF en determinadas fechas, la ejecución de obras en vísperas de temporada de lluvias es una clara falta de planificación.

“Se nota que en la ciudad hay proyectos sin planificación vial que generan, primero, problemas en el tráfico vehicular, que se satura más por fin de año y, segundo, pareciera que algunas autoridades están tratando de gastar el dinero, poniendo en riesgo un deficiente proceso constructivo, incremento de adicionales y de plazos”, sentenció.

Cabe destacar que, según el portal de Consulta Amigable del MEF, la MPA ejecutó el 58.1 % de su presupuesto de S/ 55.9 millones designados para proyectos. Es decir, se gastó solo S/ 32.5 millones hasta la segunda semana de diciembre.